¿Por que los olores y los sabores de nuestra infancia son especiales y quedan guardaditos en la memoria como algo único e insustituible?. Quizás el recuerdo de un tiempo que pasó y que ya nunca volverá nos hace recordarlo envuelto en ese aroma. Cuantas personas encuentras a diario que te comentan que nunca probarán unos guisos, o unas croquetas como las que hacía su madre o su abuela, lamentablemente son recetas siempre referidas a personas que se han ido y que se han llevado con ellas el sabor, el olor y la ternura que ponían en sus platos.
Hoy no traigo recetas, o quizás si, traigo la receta de la vida, la de disfrutar mientras se pueda de nuestros familiares, la de endulzar sus días, la de abrazar a los hijos, la de besar sus caritas, la de tomarnos de la mano mucho más y más seguido, la de dar el corazón antes que la espalda, la de ser humildes y no soberbios, la de poner miel en la sonrisa, azúcar en las palabras y ternura, mucha ternura y nobleza en cada uno de nuestros actos....
2 comentarios:
Me ha encantado esta receta !!!la deberíamos aplicar más veces en nuestra vida y así seríamos más felices.
Cuanto daño hace a veces el orgullo y qué fácil es saber comprender al que tienes al lado y perdonar .
Me pasa lo mismo con ciertos olores o sabores que me traen viejos recuerdos ....me ha encantado tu entrada
Bss
Totalmente de acuerdo contigo tambien. Gracias por tu comentario. Sigue por aqui
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